Hace unos meses se cumplieron cinco décadas desde la puesta en funcionamiento del primer Jardín Maternal al que se bautizó con el nombre de la maestra Enriqueta Schmidt.
Tiene su localización en el edificio propio que está situado sobre la Avenida Roca de Santa Rosa, siendo atendido por maestros, a los que se suman profesionales, técnicos y especialistas de distintos campos del conocimiento.
Asistentes Sociales, Psicólogos, Maestros Especiales, Médicos y Profesores conforman el equipo que asiste a los niños y niñas, controlando su alimentación, su salud, y su desarrollo.
Por aquellos años de su creación, en el organigrama del Estado Provincial no existía el Ministerio de Educación sino un Ministerio de Asuntos Sociales, de tal modo que desde su origen esta Institución ha sido administrada por organismos de lo que es hoy el Ministerio de Bienestar Social.
En esta Institución que cumplió sus Bodas de Oro, se atienden a niños que provienen de familias humildes, que están en riesgo social desde muy pequeños. A veces se trata de hijos de familias desarticuladas por distintos problemas sociales, otros por necesidades familiares de los adultos que deben cumplir obligaciones laborales y no tienen otro medio u otros recursos para atender a sus hijos.
Con el correr de los años se han producido dos cambios culturales que han incidido para que crezca la demanda por más jardines maternales como éste.
Uno es la incorporación cada vez más temprana de la mujer al mercado laboral y la otra es que las discapacidades congénitas de distinto tipo, que a principios de siglo pasado se mantenían ocultas, segregando a los niños que la sufrían del contacto con el afuera del hogar, ahora se ha transformado en una demanda social creciente de la familia, que requieren del Estado cada vez más ayuda, para que esos niños y niñas puedan tener igualdad de oportunidades.
En la actualidad existen algunas Organizaciones privadas, entre ellas asociaciones de bien público, otras generadas por los propios gremios que intentan brindar servicios de este tipo para sus asociados.
También algunas Municipalidades, sobre todo las de mayores recursos propios, han iniciado en las últimas dos décadas la creación de Jardines Maternales, como forma de dar respuesta a esta inquietud que se ha extendido a todo el ámbito geográfico de La Pampa, excediendo el límite de la Ciudad Capital.
El propio organigrama del Ministerio de Bienestar Social ha crecido generando una estructura cada vez más especializada para atender la diversidad de problemas sociales que aquejan a los niños y jóvenes.
Algunos niños huérfanos luego que alcanzan la edad de cinco años se los traslada a los Jardines del Nivel Inicial obligatorio para que cursen allí las horas del proceso de enseñanza aprendizaje.La creación de las Escuelas Especiales para atender las irregularidades motoras, la ceguera o la sordera, han permitido mejorar mucho más la atención de las dificultades que debían afrontarse dentro de lo que en un principio se denominó Guardería Infantil.
Los Comedores Escolares y Comunitarios en los Barrios de Santa Rosa, fuera de los ámbitos escolares, han ampliado también su radio de influencia y han permito a su vez descomprimir la demanda hacia el Jardín Maternal.
La obra de Instituciones como estas es fundamental, dado que es en la etapa de uno a seis años en que los niños necesitan de los mayores cuidados, alimenticios, afectivos y de socialización.
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