El 23 de Junio del año 2001 se realizó la ceremonia de depositar en su última morada los restos del Cacique Mariano Rosas. Julio Dominguez estuvo presente y su sentir del momento los registró en estos versos del poema que acompaño.
EL REGRESO DE MARIANO
Ahí lo traen a Mariano
dicen que viene llegando
a Leuvucó por la tarde
sobre sus pasos borrados.
(Yo le rezo un Padre nuestro tristemente acurrucado).
(Yo le rezo un Padre nuestro tristemente acurrucado).
Padre de las rastrilladas
con apellido prestado,
de Rosas no tiene nada
tu sangre es un chorro alzado.
(Sobre tu lanza lloraron Ranquelinos y araucanos.)
Para qué te habrían llevado
los señores militares
!qué tenía tu cabeza!
¿qué hubo de interesarles?
(Mechones de pelos duros y el valor de no igualarte).
Ahí lo traen a Mariano
hecho ceniza de zampa.
sin lanza, sin boleadoras,
puro silencio su raza.
(Yo también tendré mi tumba en un lugar de La Pampa).
Julio Domínguez (El Bardino)
los señores militares
!qué tenía tu cabeza!
¿qué hubo de interesarles?
(Mechones de pelos duros y el valor de no igualarte).
Ahí lo traen a Mariano
hecho ceniza de zampa.
sin lanza, sin boleadoras,
puro silencio su raza.
(Yo también tendré mi tumba en un lugar de La Pampa).
Julio Domínguez (El Bardino)
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