Hace diez años atrás, participamos en la capital de Tierra del Fuego, de un encuentro nacional sobre educación, organizado por varias asociaciones privadas que nuclean a Escuelas, Colegios, Institutos e Instituciones de diferentes puntos del país, dedicadas a la educación en sus distintos niveles y gestionadas por entes de carácter privado.

Después de realizadas las deliberaciones y las conferencias previstas para el Encuentro, del que participamos , tuvimos la oportunidad de conocer un poco los alrededores de la capital, de la provincia más joven de nuestra República Argentina.
Era la primera vez que íbamos a recorrer lugares no sólo bellos desde el punto de vista paisajístico, sino también a pisar tierras por las que hace miles de años anduvieron los aborígenes de ésa región austral, luego los conquistadores, después los colonos, junto con ellos los religiosos, pioneros que repoblaron la zona.

Otra cultura totalmente diferente a la nuestra, dado que estábamos en la Isla donde habrían habitado los “patagones”.
El mar, los rios, la nieve, la cordillera que rodea éstos ámbitos, presentan un contexto totalmente diferentes a la llanura pampeana. El trencito con vagones calefaccionados, permite hacer un amplio recorrido, pasando por la zona donde hay chozas construídas por los propios Onas y luego se interna en el Bosque, donde se aprecia la cascada La Macarena.

Usuhaia, la capital de Tierra del Fuego con su puerto, su nuevo aeródromo y habiéndose solucionado definitivamente los reclamos por el canal de Beagle con Chile, estaba ya gozando de las inversiones para el Turismo de nivel Internacional.

El antiguo presidio convertido en Museo Marítimo con diversas muestras permanentes de distintos objetos culturales, es uno de los paseos obligados. Hasta allí fuimos con mi compañero de viaje, el profesor García. Si aún no conocen el lugar y si pueden, no se lo pierdan.
No hay comentarios:
Publicar un comentario